El gobierno de Estados Unidos tiene un plan para fragmentar varias regiones en el mundo y consolidar su poderío, advirtió Michel Chossudovsky, del Centro para la Investigación de la Globalización, en reunión con integrantes del Partido Socialista Unido de Venezuela.

“Estados Unidos quiere desencadenar la secesión en América Latina”, aseguró Chossudovsky, quien se encuentra de visita en Venezuela para participar en la VII Cumbre de la Deuda Social que comienza hoy en Caracas. Pero Estados Unidos también pretende fracturar el Medio Oriente. El objetivo es posesionarse de los recursos naturales, como gas, petróleo y agua.

La llamada “balcanización” (o la imposición del modelo aplicado en la península balcánica, con la división de la antigua federación Yugoslava) se ha puesto en marcha en distintos países, sin escrúpulo alguno, denuncia el investigador.

“En Kosovo, Estados Unidos se vinculó con el Ejército de Liberación de Kosovo, un grupo relacionado con el crimen y el narcotráfico”, señala Chossudovsky. “En Haití el golpe militar fue implementado por el embajador de Estados Unidos, James Foley. Asesores de Kosovo llegaron a Haití para asesorar la formación de funcionarios de policía. Así, la policía haitiana se convirtió en una organización paramilitar”. Pakistán también se encuentra en la mira de Estados Unidos: George Bush está apoyando movimientos separatistas pakistaníes.

En cambio, en opinión del investigador, el plan de Estados Unidos para Venezuela no es la división territorial, sino la desestabilización total.

Según Chossudovsky se quiere fracturar algunos países “para debilitar la soberanía nacional y acabar con el modelo de Estado-nación. Romper las fronteras es una manera de ejercer control político. Por ejemplo, en las academias militares de Estados Unidos hay un mapa, confidencial, sobre el Nuevo Medio Oriente, en el cual se parte a Irak en tres pedazos y se hace lo mismo con Pakistán. Eso es por el petróleo. Sabemos que también hay proyectos para la desestabilización en China”.

Tal como lo explicó Chossudovsky, las operaciones encubiertas de Estados Unidos en el Medio Oriente y América Latina son lideradas por John Negroponte, vicesecretario de Estado estadounidense.