10 técnicas modernas de control mental

Nota del Editor: Este artículo apareció publicado por primera vez en el Centro de Investigación sobre la Globalización (Global Research) en enero de 2015.

Cuanto más se realicen investigaciones sobre el control mental, más se llegará a la conclusión de que existe un plan bien coordinado que ha estado vigente durante mucho tiempo con el objetivo de convertir a la raza humana en autómatas sin capacidad de pensar. Mientras el hombre ha buscado ejercer el poder sobre las masas, el control mental ha sido manipulado por aquellos que estudian el comportamiento humano para doblegar a grandes masa de la población a voluntad de un pequeño grupo de “élite”.

Hoy, hemos entrado en una peligrosa etapa en la que el control mental ha adquirido una dimensión física y científica que amenaza con transformarse en una situación permanente si no tomamos conciencia de las herramientas de las que dispone la dictadura tecnocrática que se expande en escala mundial.

El control mental moderno es tanto tecnológico como psicológico. Las pruebas revelan que simplemente al exponer las técnicas de control mental, los efectos se pueden reducir o eliminar, al menos para la publicidad y propaganda sobre el control mental. Más difíciles de contrarrestar son las intrusiones físicas, que el complejo militar-industrial continúa desarrollando y mejorando.

1. Educación: Esta es la [técnica] más obvia, pero sigue siendo la más insidiosa. Siempre ha sido la última fantasía de un dictador aspirante el “educar” a niños que son fáciles de impresionar. Nadie ha sido más práctico a la hora de exponer la agenda de la educación moderna que Charlotte Iserbyt: uno puede comenzar a investigar en esta área descargando un documento en formato PDF gratuito de su libro, ‘The Deliberate Dumbing Down of America’, que pone al descubierto el papel de las fundaciones globalistas en la construcción de un futuro destinado a producir aviones no tripulados al servicio y dirigidos por un grupo de élite plenamente educado y consciente.

2. Publicidad y propaganda: Edward Bernays ha sido mencionado como el inventor de la cultura de consumo, diseñada principalmente para identificar la imagen que las personas tienen de sí mismas (o bien la falta de ellas) para convertir un deseo en una necesidad. Originalmente, esto fue usado productos como cigarrillos. Sin embargo, Bernays también señaló en su libro de 1928, ‘Propaganda’, que “la propaganda es el brazo derecho del Gobierno invisible”. Esto se puede apreciar más claramente en el moderno Estado policial y la cultura de la denuncia de los ciudadanos, envuelta en una guerra pseudo patriótica contra el terrorismo. La mayor consolidación de los medios ha permitido que toda la estructura corporativa se fusione con el Gobierno, que ahora utiliza el concepto de inserción de propaganda. Los medios de comunicación; las noticias impresas, las películas y los programas televisión por cable funcionan perfectamente a la hora de articular un mensaje general que parece verdadero al provenir de numerosas fuentes [de información] de manera simultánea. Cuando uno escucha atento para identificar el “mensaje” principal, se observa esta impronta en todas partes. Y esto sin tomar en cuenta los mensajes subliminales.

3. Programación predictiva: Muchos todavía niegan que la programación predictiva sea ​​real. Invitaría a cualquiera a examinar el archivo de documentación reunido por Alan Watt para sacar conclusiones. La programación predictiva tiene sus orígenes en el Hollywood elitista, donde la pantalla grande puede ofrecer una amplia visión de hacia dónde se dirige la sociedad. Solamente mira en retrospectiva los libros y películas que pensaste que eran extravagantes, o “ciencia ficción” y luego echa un vistazo de cerca a la sociedad de hoy. Para un desglose detallado con ejemplos específicos, Vigilant Citizen  es un buen recurso [de información] que probablemente te permita ver el “entretenimiento” bajo una luz completamente diferente.

4. Deportes, política y religión: Algunos podrían ofenderse al ver que la religión, o incluso la política y los deportes entre las técnicas de control mental. El tema central es el mismo en todas partes: divide y vencerás. Las técnicas son bastante simples: aniquilan la inclinación natural de las personas a cooperar para sobrevivir, y les enseñan a formar equipos empeñados en dominar y ganar. El deporte siempre ha jugado un rol como una distracción clave que acorrala las tendencias tribales en un evento que carece de importancia, y que en la América moderna ya ha alcanzado proporciones ridículas cuando se protesta porque una celebridad deportiva abandona su ciudad; pero los problemas humanos esenciales, como la libertad, resultan insignificantes. El discurso político está limitado por un paradigma rígido de izquierda-derecha en el que la oposición es fácilmente controlada, mientras que la religión es usada como el telón de fondo en casi todas las guerras a lo largo de la historia.

5. Alimentos, agua y aire: Los aditivos, las toxinas y otros venenos alteran literalmente la química del cerebro para producir docilidad y apatía. Se ha demostrado que el flúor en el agua potable reduce el IQ; El Aspartamo y el Glutomato monosódico (MSG, por sus siglas en inglés) son excitotoxinas que excitan las células del cerebro hasta provocar su muerte; y el fácil acceso a la comida rápida (‘fast food’) que contiene por lo general estos generalmente ha creado una población que carece de orientación y motivación para gozar de un estilo de vida activo. La mayor parte del mundo moderno está perfectamente preparado para la receptividad pasiva y la aceptación de lo que la élite dictatorial determine. Y si eliges observar tu dieta de modo diligente, la élite está preparada para pulverizar a la población desde arriba.

6. Drogas: Puede ser cualquier sustancia adictiva, pero la misión de los manipuladores mentales es asegurarse de que eres adicto a algo. Uno de los principales componentes de la agenda moderna de control mental es la psiquiatría, que tiene como objetivo catalogar a todas las personas según sus trastornos, en oposición a su potencial humano. Esto ya había salido analizado en libros como ‘Brave New World’. Hoy en día, se ha llegado incluso a más extremos a medida que la tiranía médica ha tomado el control de todo aquellos que registran algún tipo de desorden, particularmente aquellos que cuestionan la autoridad. El uso de drogas neurotóxicas en el ejército ha derivado en número récord de suicidios. Lo peor de todo es que el moderno narco Estado ya ha trastocado a más de un 25% de los niños estadounidenses a través de medicamentos de adormecimiento mental.

7. Pruebas militares: El ejército tiene una larga historia como campo de pruebas para el control mental. La mentalidad de un militar es quizás la más maleable, ya que aquellos que viven en el ejército generalmente hacen eco de las estructuras de jerarquía, control y una obediencia sin condiciones para alcanzar una determinada misión. Para el creciente número de militares que cuestionan su adoctrinamiento, una historia reciente alertó sobre los planes de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa (DARPA, por sus siglas en inglés) para colocarles cascos de control mental transcraneal para que no abandonen el redil de la obediencia.

8. Espectro electromagnético: Un océano electromagnético nos cubre a todos, portadores de modernos y útiles dispositivos que han demostrado tener un impacto directo en el funcionamiento del cerebro.

En una admisión tácita de lo que es posible, un investigador ha estado trabajando con un “casco de Dios” con el objetivo de inducir visiones al alterar el campo electromagnético del cerebro.

Nuestro océano moderno nos cubre pasivamente bañados por olas que alteran potencialmente la mente, mientras que una amplia gama de instrumentos, como las torres de telefonía celular, están ahora a disposición del controlador mental en potencia para cualquier intervención en directa.

9. Televisión, computadora y “promedio de parpadeo”: De por sí resulta suficientemente lamentable que lo que está “programado” en su televisor (al que se accede a través del “control” remoto) esté diseñado; todo se vuelve más fácil cuando se le adormece, convirtiéndolo en un arma psicosocial. Las pruebas de “promedio de parpadeo” revelan que las ondas alfa del cerebro pueden alteran, produciendo cierto tipo de hipnosis, no es un buen augurio tomando en cuenta la última revelación de que las luces pueden transmitir datos codificados de Internet “parpadeando más rápido de lo que el ojo puede ver”.

La velocidad de parpadeo de la computadora pero a través de videojuegos, redes sociales y toda una estructura en la base que termina por sobrecargar al cerebro de información, el ritmo rápido de la comunicación moderna induce a un estado de Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH, por sus siglas en inglés). Una investigación sobre videojuegos reveló que el juego prolongado puede dar como resultado un flujo de sangre menor al cerebro, con lo cual, se daña el control sobre las emociones. Además, los juegos con escenarios de guerra y Estado policial funcionan para que el individuo rompa la conexión con la realidad. Una mirada al video de WikiLeaks ‘Collateral Murder’ debería resultar familiar para cualquiera que haya jugado Call of Duty.

10. Nanobots: Del horror de la ciencia ficción al cerebro moderno; los nanobots están en camino. La modificación cerebral directa cabe ya en la categoría de “neuro-ingeniería”. Un artículo de Wired de principios de 2009 destacó que la manipulación cerebral directa a través de fibra óptica un tanto caótica, pero una vez instalada “podría hacer feliz a alguien con sólo presionar un botón”. Los nanobots asumen el proceso a un nivel automatizado, reconectando al cerebro molécula por molécula. Resulta peor todavía que estos mini droides tengan la capacidad de reproducirse a sí mismos, lo que obliga a uno a preguntarse cómo es que este genio volverá a meterse en su botella una vez que ha sido liberado, ¿Cuándo llegarán los nanobots? Tan pronto como a principios de 2020.

Se está llevando a cabo un esfuerzo concertado para manipular y predecir el comportamiento humano a fin de que los científicos sociales y la élite dictatorial puedan controlar a las masas y protegerse así mismas de las consecuencias que producirían seres humanos totalmente despiertos y libres. Únicamente al revelarnos frente a los de intentos de ponernos a dormir es como tendremos la oportunidad de preservar nuestro libre albedrío.

Nicholas West

Artículo original en inglés:

Ten Modern Methods of Mind Control, publicado enero de 2015.

Traducido por Ariel Noyola Rodríguez para el Centro de Investigación sobre la Globalización (Global Research).

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