Globalización

Autoridades, parlamentarios, intelectuales y personas solidarias dejaron en las últimas semana claro el rechazo en Francia al bloqueo estadounidense contra Cuba, una política que se enfrenta hoy en la ONU a otro contundente revés.

En declaraciones a Prensa Latina, pronunciamientos públicos y cartas enviadas a congresistas y diplomáticos norteamericanos sumaron sus voces al reclamo universal del fin de un cerco económico, comercial y financiero impuesto hace 60 años, que la actual administración en la Casa Blanca recrudece casi a diario.

Desde el legislativo francés, diputados y senadores remitieron misivas al Congreso de Estados Unidos para abogar por el levantamiento de las medidas que tienen un severo impacto en la población de la isla y constituyen el principal obstáculo en su desarrollo.

El grupo parlamentario de Amistad Francia-Caribe del Senado envió esta semana una carta al vicepresidente Mike Pence, quien preside el Senado del país norteño, con tal pedido.

Firmada por la vicepresidenta de esa cámara del Parlamento francés y líder del grupo de amistad, Hélène Conway-Mouret, recuerda que desde hace años la ONU llama al fin del bloqueo a través de una resolución, presentada por la mayor de las Antillas, como la que se votará este jueves en la Asamblea General.

Por su parte, diputados a la Asamblea Nacional de Francia remitieron a finales de octubre una misiva a la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, la demócrata Nancy Pelosi, solicitándole respaldo en el rechazo al bloqueo impuesto por Washington a Cuba hace seis décadas.

Mediante la iniciativa, el grupo parlamentario de Amistad Francia-Cuba instó a la líder opositora a propiciar el apoyo de la cámara baja del Congreso norteamericano, donde su partido es mayoría, al proyecto de resolución cubano.

Desde el gobierno, el secretario de Estado del Comercio Exterior y el Turismo, Jean-Baptiste Lemoyne, reiteró a Prensa Latina la postura de París contra el cerco y su componente extraterritorial.

‘Nuestra posición es muy clara, Francia quiere poder comerciar con los países que escoja en el mundo, sin dejarse intimidar por las sanciones extraterritoriales’, afirmó.

También autoridades locales, como el alcalde de Vitry-sur-Seine, Jean-Claude Kennedy, expresaron su condena al bloqueo, una política que la comunidad internacional vuelve hoy a sentar en el banquillo de acusados, con una votación en la Asamblea General de la ONU similar a la que año tras año desde 1992 ha dejado a la Casa Blanca aislada.

El bloqueo es inadmisible, porque ataca abiertamente a un pueblo para que renuncie a su soberanía, subrayó Kennedy.

En el ámbito de la política francesa, el Partido Comunista y el movimiento La Francia Insumisa (LFI) fueron en los últimos días categóricos en su denuncia de la agresividad de Washington hacia la isla caribeña.

Para el líder comunista Fabien Roussel, secretario nacional de la organización, Cuba lleva 60 años en la línea de fuego, frente a un imperio estadounidense que trata de ahogarla.

Roussel calificó al bloqueo de ‘el más largo, injusto y cruel de la historia’ y exigió su fin.

Por su parte, LFI llamó a la comunidad internacional a manifestar en la Asamblea General de la ONU otro rotundo rechazo al bloqueo estadounidense.

Esperamos una nueva victoria de la isla en Naciones Unidas ante esta medida vil e insensata del imperialismo norteamericano, señaló a Prensa Latina Christian Rodríguez, integrante del equipo internacional del movimiento de izquierda.

También contundente en su opinión sobre la hostilidad norteamericana fue Víctor Fernández, presidente de Cuba Cooperación Francia, una asociación que en los últimos 20 años ha materializado decenas de proyectos de beneficio social en provincias de la mayor de las Antillas.

El bloqueo económico, comercial y financiero estadounidense representa un fuerte obstáculo para el desarrollo de Cuba, que habría sido notable sin esta política criminal, sentenció.

Académicos e intelectuales como Ignacio Ramonet, Salim Lamrani y Jean Ortiz fijaron posiciones bien argumentadas contra el cerco, por su carácter extraterritorial, su impacto en la población y su objetivo desafiante del Derecho Internacional y la Carta de la ONU de imponer un cambio de régimen en La Habana.

Particularmente activas han sido en los meses y las semanas previas a la votación de hoy en la Asamblea General de Naciones Unidas organizaciones de solidaridad que durante muchos años han acompañado a los cubanos en su lucha contra el bloqueo y ayudado a divulgar la verdad de la revolución, tergiversada y manipulada en la gran prensa.

En ese sentido destacan Cuba Sí France, Cuba Linda, France Cuba y ALBA Francia, que a través de activistas como Charly Bouhana, Didier Lalande, Didier Philippe, Maigualida Rivas, Michel Taupin, Rose-Marie Lou y Roxana Prud’homme emitieron condenas enérgicas a Estados Unidos.

Waldo Mendiluza