Contra Huawei, el capítulo telecomunicaciones de la guerra de Trump contra China

Región: ,

Luego de que la administración Trump incluyera a la empresa china Huawei en su “lista negra” por supuesta competencia desleal y robo de tecnología; las principales empresas tecnológicas estadounidenses, con Google a la cabeza, han decidido cortar la colaboración que mantenían con la compañía china.

Si bien algunos pueden catalogar esta decisión como parte de las tensiones comerciales que dominan la relación entre ambos países; la realidad es que va mucho más allá.

Detrás del acoso a Huawei no se encuentra el uso de las patentes, sino el control del sistema global de telecomunicaciones, mismo que permite tener una ventaja estratégica decisiva en materia de inteligencia, contrainteligencia y espionaje.

En otras palabras: dominar las telecomunicaciones globales permite a Estados Unidos y sus aliados (Gran Bretaña, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, “los Cinco Ojos”) la capacidad para seguir operando la red de espionaje global digital denunciada por Snowden en 2013; misma que hizo a los servicios de inteligencia rusos regresar a las máquinas de escribir para garantizar la secrecía de sus informes.[1]

Ahora, ¿por qué Huawei se los impide? Según algunas informaciones filtradas, la empresa china desarrolló de forma autónoma un sistema de cifrado de datos que hasta el momento es imposible de vulnerar incluso para la todopoderosa NSA, lo cual ha llevado a muchos servicios de inteligencia del mundo a preferirlos por encima de sus competidores estadounidenses con el fin de garantizar la confidencialidad de sus comunicaciones.[2]

Dominar las telecomunicaciones globales permite a Estados Unidos y sus aliados la capacidad para seguir operando la red de espionaje global digital denunciada por Snowden en 2013

En resumen, el golpe contra Huawei parece el capítulo “Telecomunicaciones y Ciberespacio” de la guerra que ha lanzado Estados Unidos contra China; que también tiene su capítulo Comercial (sanciones y aranceles a los productos chinos) y Geopolítico (guerra por los recursos naturales e influencia política, desde el Mar del sur de China, Medio Oriente y Norte de África, hasta Venezuela).

Tierras raras, la respuesta china.

Acorde a su milenaria filosofía, China suele ser gradualista en sus acciones y evaluar los procesos a partir de mediciones de larga data, cuestión que suele chocar con la inmediatez estadounidense, país con menos de cuatro siglos de existencia.

Sin embargo, en el caso Huawei, el liderato chino decidió mostrar que también posee grandes reflejos y capacidad para prever escenarios.

Apenas unas horas después del anuncio de Trump, el mandatario chino Xi Jinping visitó una instalación de procesamiento de tierras raras, acompañado por el viceprimer ministro Liu He, jefe del equipo de negociaciones comerciales con Estados Unidos.[3]

Es decir, amenazó veladamente a Estados Unidos con disminuir o cortar su suministro.

Lo anterior para nada es un dato menor. Las llamadas “tierras raras” son elementos esenciales para las empresas tecnológicas estadounidenses, tanto civiles (las que producen celulares, computadoras, automóviles eléctricos y otros) como militares (armas láser, misiles, cazas y demás); y para desgracia de Estados Unidos, sus depósitos parecen estar en aún menos manos que los hidrocarburos pues el 90% de las reservas globales las tiene China, país al que le compran el 80% de sus requerimientos.

Tras las presiones financieras que provocaron las caídas de Wall Street y el Índice Nasdaq, Trump decidió dar una moratoria de tres meses a las sanciones,[4] gesto que parece ser parte de su clásica estrategia de negociación: primero golpea para ablandar y luego se sienta con un rival asustado o debilitado… Aunque en esta ocasión, el póker de Trump parece que se topó con el milenario ‘go’ chino.

Todo lo anterior me deja las siguientes reflexiones:

  1. Con un movimiento delicado, China le recordó a Estados Unidos que tiene capacidad de respuesta y aún más importante: que no son dependientes sino interdependientes, aunque la arrogancia de Washington como “país excepcional” le impida verlo.
  2. Pekín dio cátedra del manejo político de los insumos elementales para la industria, sobre todo cuando el de enfrente depende en gran medida de ti… ¡Pero los neoliberales mexicanos crucifican a AMLO por empecinarse en construir una refinería que disminuya nuestra dependencia de Estados Unidos! ¡La locura total!
  3. Es muy posible que el conflicto en Venezuela se recrudezca pues en su territorio no sólo están las mayores reservas de petróleo del mundo, también uno de los mayores depósitos de tierras raras, específicamente coltán, cuyo precio estimó Hugo Chávez en 2010 en 100 mil millones de dólares[5] (eso sin contar su valor estratégico, que ante la amenaza china se debió disparar hasta las nubes). Y es que no sería la primera vez que Washington busca alternativas de abastecimiento ante complicaciones geopolíticas y estratégicas, pues basta recordar que la idea de la integración energética de Norteamérica (elemento central del TLCAN) surgió a finales de la década de 1970 luego del shock estratégico que supuso el embargo petrolero de 1973. (Véase: Saxe, John. La compraventa de México. Plaza Janés, 2002).

Con un movimiento delicado, China le recordó a Estados Unidos que tiene capacidad de respuesta y aún más importante: que no son dependientes sino interdependientes

Finalmente, recordar que la peor noticia para la humanidad es que en la historia, desde la época de los griegos hasta la actualidad, prácticamente todas las rivalidades/guerras comerciales se han convertido tarde o temprano en conflictos armados.

Ojalá lo tengan presente en la Cancillería mexicana, donde hace poco premiaron al exembajador chino como una forma de presión a Estados Unidos[6], olvidando que el T-MEC prácticamente nos hace enemigos de los enemigos comerciales de nuestro poderoso vecino del norte[7]; como les recordó el Secretario de Comercio de Trump, Wilbur Ross a empresarios y miembros del gobierno federal mexicano, cuando solicitó mantener a raya las inversiones chinas durante un foro de negocios realizado en abril pasado.[8]

Edgar A. Valenzuela

Edgar A. Valenzuela: Politólogo egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Notas:

[1] Máquinas de escribir, herramienta a la que va a recurrir Rusia para evitar filtraciones. Actualidad RT, 11 de julio de 2013. Disponible en: https://es.rt.com/pWQ

[2] Los “Cinco Ojos” contra Huawei. Red Voltaire, 7 de diciembre de 2018. Disponible en: bit.ly/2QoXTph

[3] Tierras raras: ¿la carta ganadora de Pekín en su pugna comercial con Washington? Actualidad RT, 22 de mayo de 2019. Consultado en: es.rt.com/6ri4

[4] Donald Trump da tres meses de tregua comercial a Huawei. 20 minutos, 21 de mayo de 2019. Consultado en: bit.ly/2W2V2Z4

[5] Tierras raras o coltán: La otra riqueza mineral de Venezuela. Actualidad RT, 10 de julio de 2018. Consultado en: es.rt.com/60ox

[6] Otorga gobierno condecoración Águila Azteca al embajador chino. Diario La Jornada, 29 de abril de 2019. Consultado en: bit.ly/2HYILuS

[7] EE UU podrá vetar en el nuevo TLC acuerdos comerciales de México o Canadá con China. El País, 4 de octubre de 2018. Consultado en: bit.ly/2IF50Gr

[8] Estados Unidos pidió a México rechazar inversión china: Alfonso Romo. El Financiero, 23 de mayo de 2019. Consultado en: bit.ly/2X4T3Qu

Comentario sobre artículos de Globalización en nuestra página de Facebook
Conviértase en miembro de Globalización

Artículos de:

Disclaimer: The contents of this article are of sole responsibility of the author(s). The Centre for Research on Globalization will not be responsible for any inaccurate or incorrect statement in this article. The Center of Research on Globalization grants permission to cross-post original Global Research articles on community internet sites as long as the text & title are not modified. The source and the author's copyright must be displayed. For publication of Global Research articles in print or other forms including commercial internet sites, contact: [email protected]

www.globalresearch.ca contains copyrighted material the use of which has not always been specifically authorized by the copyright owner. We are making such material available to our readers under the provisions of "fair use" in an effort to advance a better understanding of political, economic and social issues. The material on this site is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving it for research and educational purposes. If you wish to use copyrighted material for purposes other than "fair use" you must request permission from the copyright owner.

For media inquiries: [email protected]