El jefe de la Organización Mundial de la Salud: Otro que siembra miedo

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El Director General de la OMS, Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, dice que no hay seguridad de una vacuna efectiva. Que el único modo de detener más brotes de coronavirus por ahora se reduce a “los fundamentos de la salud pública y el control de enfermedades”, es decir, “probar, aislar y tratar pacientes, y rastrear y poner en cuarentena a sus contactos”. Ghebreyesus luego especificó que para las personas lo más importante es el distanciamiento social, usar una máscara, lavarse las manos y tener cuidado de no toser con los demás.

El Director General compartió sus preocupaciones durante una conferencia de prensa el lunes.

El objetivo evidente de la declaración del Sr Ghebreyesus es desacreditar el invento de una vacuna cuya efectividad fue probada en Rusia.

La vacuna rusa será gratuita en Rusia, a partir de octubre, y será exportada a un precio bajo a otros países. El jefe de la OMS obviamente quiere que continúe el secuestro de libertades y derechos por parte de los gobiernos, para que la gente esté dispuesta a rescatar sus derechos y libertades, dejándose vacunar con las vacunas onerosas y de dudosa efectividad como la que acaba de anunciar el gigante farmacéutico Astra Zeneca, cuyo vocero ha confirmado que su compañía no acepta acciones legales por ningún posible efecto secundario causado por su vacuna Covid. Los afectados no tendrán recurso legal.

Astra Zeneca es una de las 25 compañías farmacéuticas en todo el mundo que ya está probando sus vacunas Covid en humanos, en preparación para inyectar a cientos de millones de personas. Estos son tiempos de hacer fortunas para la compañía farmacéutica más grande de Gran Bretaña. Con eso queda claro el motivo por el cual el Sr Ghebreyesus quiere implícitamente negar la efectividad de la vacuna rusa e incita a continuar con el secuestro de los derechos y libertades de los ciudadanos.

Una prueba de su mala fe es el que omitió mencionar el éxito obtenido por el gobierno sueco en su técnica preventiva, sin privar a los ciudadanos de sus libertades.

Otro síntoma del objetivo de la campaña terrorista que se lleva a cabo manipulando las masas con la amenaza de una epidemia de baja mortalidad (5%) Es que el regreso a la libertad, será solo para algunos privilegiados.

Se ha sabido de la firma Clear de Identificación facial que va a emitir un pase para que sus portadores recobren la libertad.

El nuevo Pase sanitario de Clear y otras “innovaciones de alta tecnología de Covid” son una advertencia clara de cómo funcionará la “Nueva Normalidad” globalista que se está trazando. El acceso a viajes, deportes y restaurantes puede estar prohibido para todos los que se nieguen a cumplir.

El pase estaba previsto para mayo 2020. En inglés se le piensa llamar Health Pass y es una extensión de la aplicación móvil de Clear. El servicio vincula datos relacionados con COVID-19, como un cuestionario de salud y un control de temperatura para evaluar si alguien está lo suficientemente saludable como para ingresar a un lugar determinado. Además, la aplicación tiene la capacidad de vincular los resultados de las pruebas de COVID-19 a través de asociaciones con laboratorios y, finalmente, el estado de vacunación. Para poder viajar, se va a exigir el Condé Nast Traveler, la última tecnología mediante la identificación biométrica. Como se ve claramente, la orquestación entre medios y gobiernos de políticos corruptos de una campaña de miedo para doblegar a la población, al punto de hacerle aceptar la suspensión de derechos y libertades básicas, tenía que tener un objetivo de mayúsculo de enriquecimiento, para los iniciados de siempre. La aparición a precio accesible de una vacuna elaborada y comprobada en Rusia (país de antiguas e innegables credenciales científicas) es una pésima noticia para aquellos que pensaban en los miles de millones que generaría una vacuna obligada de la entera población mundial. Para obligar a que la humanidad acepte vacunarse, había que secuestrar primero sus libertades, derechos y costumbres.

Umberto Mazzei

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