La memoria selectiva de Occidente: los judíos … y los demás

Recordatorio Rappel :

La semana pasada expresaba mi temor de que hubiera vuelto a Francia “el tiempo de las redadas” [1]. Ante la probada discriminación de los gitanos y la dramática deshumanización con la que los tratan el presidente Sarkozy y su derecha xenófoba (hasta el punto de irritar a las instancias internacionales), ¿no podríamos preguntarnos por qué los gitanos no tendrían los mismos derechos que los judíos? En efecto, estas comunidades, ambas milenarias, padecieron las mismas cacerías durante la Segunda Guerra Mundial y se encontraron en los mismos campos de exterminio de Buchenwald, Auschwitz, Ravensbrück, etc., en los que parece que fueron suprimidos al menos 500.000 gitanos, a los que entonces se llamaba zíngaros.

Por consiguiente, una parte de Europa tiene la misma responsabilidad respecto a los gitanos que respecto a los judíos en la manera expeditiva y asesina como se deshizo de ellos bajo el régimen nazi. A menos que haya una justicia de geometría variable, entonces, ¿por qué se ha establecido una diferencia en la manera de expiar nuestros crímenes de entonces?

La honestidad y la preocupación por una justicia equitativa exigirían como mínimo plantearse esta pregunta. Y puesto que es posible felicitarse por las reacciones de las actuales instancias internacionales debido a cómo éstas parecen condenar la suerte que Francia ha reservado a esta comunidad discriminada, quizá sería el momento de considerar la posibilidad que tendrían las poblaciones gitanas de establecerse en las tierras que una Europa cada vez más “ampliada” se dignaría concederles… Sin dejar de condenar de la manera más firme la manera como se está tratando por el momento este asunto en Francia, puede que el presidente francés no se equivoque al querer ampliar el marco del debate.

Alegoría:

Tratemos, pues, de hacerlo mejor que con el anterior intento de imponer en tierras árabes el joven Estado de Israel, el cual resulta ser un fracaso irresoluble sobre las actuales bases… Estudiando el mapa de la Unión Europea (ya que este problema nos concierne colectivamente), ¿qué lugar podría convenir? Por ejemplo, ¡Francia! Excelente situación, en la que vastas regiones todavía no están urbanizadas. Como algunos se lamentan de la desertización de las zonas rurales, sin lugar a dudas esto sería una manera de redinamizarlas. Para empezar, se podría trazar en ellas una especie de “Línea Verde” y a continuación se vería las modalidades para dar a este proyecto de Estado todas las garantías útiles que prevé el derecho internacional en sus muchos textos. Con la plétora de funcionarios de los que disponemos y la experiencia reciente del establecimiento de Kosovo en Serbia, apostamos a que se podría destinar provisionalmente a determinados “expertos” a esta misión, ¿cómo era? esto…¡ah, sí: ¡“humanitaria”! eso es…. Éste sí que es un puesto soñado para el French doctor y una manera honorable de recuperar el prestigio de antaño un tanto deslustrado últimamente. Y para no precipitar las cosas, establezcamos un plan quinquenal que tenga por horizonte 2020, cuando se podría llevar a la pila bautismal un 28 Estado europeo destinado a la comunidad gitana que quisiera establecerse en él. Estado que serviría también para acoger, esto cae por su propio peso, a los muchos refugiados de todas las variedades de gitanos expulsados regularmente de tal o cual país desde hace siglos de errar.

Para una Europa económicamente acabada esto sería una cantera formidable con unas salidas inesperadas. Además, con el actual presidente francés, Nicolas Sarközy de Nagy-Bocsa, el cual no tiene que remontar muy lejos en el tiempo para encontrar sus orígenes, Francia presenta casi todas las ventajas de semejante elección. Sin contar con que, en caso de que las elecciones francesas de 2012 se presenten mal, podría presentar directamente su candidatura a la presidencia de este nuevo futuro Estado…

– Sí, me responderán ustedes, pero los gitanos no quieren establecerse en unas fronteras fijas, son nómadas, todo el mundo lo sabe, y rápidamente podrían encontrarse en Francia y éste es el nudo del problema.

– ¡No pasa nada! Francia es un graaaaaaaaaaaan país (sus representantes no han dejado de pregonarlo por todas partes por si acaso se duda en comparación con Rusia, Canadá, Estados Unidos, China Brasil, Australia, India, Argentina, Kazajastán, Sudán) y, por consiguiente, las familias gitanas que no quieran fijarse en los límites de esta “Linea Verde” irán aquí y allá con sus caravanas como han hecho siempre y se establecerán donde quieran, un poco como puestos destacados o colonias, si lo prefieren…

– ¡Eh, eh, cuidado con eso, que hay palabras peligrosas que no se pueden utilizar impunemente! Pero bueno, a mí me parece bien, aunque si estas colonias, como dice usted, no contentas con superar esta “Línea Verde” desbordan incluso las antiguas fronteras francesas…¿qué hacemos?

– Tampoco pasa nada, ¡la UE no se va a preocupar por tan poco! Y a grandes rasgos, si desbordan por el norte se encontrarán en tierra valona, que ya no sabe si quiere seguir siendo belga o convertirse en francesa y, por lo tanto, con unas cuantas familias gitanas más o menos no cambiará mucho la cosa. Al este se encontrarán o bien en Alemania, otro gran país de la UE que bien puede ocuparse de unos cuantos, algunos de cuyos mayores envió a sus campos nazis; o bien a Italia, que en aquella época era aliada de la Alemania de Hitler y que, por lo tanto, también tiene su parte de responsabilidad. Y al sur podrán elegir entre el País Vasco y los Países Catalanes, que ya no se reconoce como españoles y reclaman la posibilidad su independencia, así que, hay bastante sitio para estos pocos extraviados que no quieran hacerse sedentarios en el territorio delimitado que les asigne la UE…

– Sí, pero también parece que son mentirosos, ladrones y de extrañas costumbres, y que se instalan donde les da la gana y ponen en peligro la seguridad del Estado y de las comunas que los acogen.

– ¡Pero eso no es grave, caramba! Se construirá un muro de seguridad para protegernos… Imagine la tarea, ¡es una bendición que no hay que dejar pasar en los tiempos que corren! Y luego estarán también nuestros policías y nuestras fuerzas del orden para vigilar estas nuevas fronteras… Se podrían incluso prever unas puertas de acceso cuyo cierre y apertura controlarían estas fuerzas de seguridad en caso de agitación excesiva o de riesgo de rebelión. Así no habría ningún riesgo de infiltración.

– Pero, ¡y si aún así algunos de ellos lograran librarse del control y se mezclaran entonces con las poblaciones locales! Imagínese las consecuencias…

– Pero, como le digo, los “expertos” estudiarán todo esto. ¡Venga, hombre, tampoco es tan difícil darles papeles con los que se les identificaría claramente como gitanos! Esto no son más que detalles y ya ve usted que siempre hay una solución para todo. ¡No olvide que estamos en Europa! No nos vamos a dejar influenciar por tan poco. Llegado el caso, ¡enviaremos al ejército y en seguida entenderán quién es el amo! Además, como usted sabe, para facilitar estas grandes maniobras tenemos un ADM (Arma de Descerebramiento Masivo) de lo más eficaz, imprescindible: los medios de comunicación habituales se dedicarán a un bombardeo en toda regla y publicarán las venas líricas y los papeles ditirámbicos que no dejarán de parir para nosotros la pandilla de intelectuales bien pensantes de lo más selecto de París a propósito de esta solución y también publicarán las entrevistas a algunas estrellas populares cuidadosamente seleccionadas… Estoy seguro de que incluso se podría imaginar un macro concierto europeo para sacar fondos. Se le podría llamar, déjame pensarlo, a ver…“Eurocarretera del Gitano”… ¡ya veo los carteles, el impacto en el público! Ya lo verá, será muy sorprendente, no se podrán negar…

Epílogo:

A través de la cuestión planteada por las gentes del viaje* vivimos un momento interesante que permite contabilizar cuántos de los que siempre están dispuestos a dictar sus imperativos a las demás naciones se propondrán para acoger a los gitanos que lo deseen… Puede que por fin comprendan la absolutamente legítima resistencia de los palestinos a quienes, sin embargo, estos mismos habladores exigen desde hace décadas que acepten las condiciones… inaceptables que la entidad sionistas sostenida por ellos trata de imponer a los palestinos…

Moraleja de la historia: desgraciadamente para los gitanos, no son judíos…

Y antes de que la imagen de Francia sea alterada completamente por la tontería de unos cuantos incultos arrogantes, por medio de estas líneas quisiera recordar lo que también ha podido hacer su grandeur [grandeza]: “Hace ocho días, me quedé extasiado ante un campamento de gitanos que se habían establecido en Rouen. Es ya la tercera vez que los veo y cada vez con un placer renovado. Lo admirable es que, aunque son inofensivos como corderos excitaban el odio de los burgueses. Me gané el desprecio de la muchedumbre al darles unas cuantas monedas. Y he oído palabras hermosas al estilo de Prudhomme. Este odio tiene relación con algo muy profundo y complejo. Se encuentra en todas las personas de orden. Es el odio que se tiene al beduino, al hereje, al filósofo, al solitario, al poeta. Y en este odio hay miedo. A mí, que siempre he estado a favor de las minorías, me exaspera. El día que ya no me indigne caeré de bruces, como una muñeca cuando le quitas el palo que la sostiene”.

Extracto de una carta de Gustave Flaubert a George Sand – 12 de junio de 1867

Concretamente:

Los hechos están claros y son indiscutibles: una circular del pasado 5 de agosto firmada por el director del gabinete del ministro [del Interior francés] Hortefeux, dirigida a los prefectos, al director general de la policía y de la gendarmería nacionales, decía lo siguiente: “El pasado 28 de julio el presidente de la República fijó unos objetivos precisos para la evacuación de los campamentos ilícitos: 300 campamentos o implantaciones ilícitas tendrán que ser evacuados de aquí a tres meses, en prioridad los de los gitanos”.

Y más adelante la misma circular estipula que cada prefecto deber asegurarse “de que se realiza como mínimo una operación importante por semana (evacuación/desmantelamiento/reconducción [a la frontera]) que concierna prioritariamente a los gitanos”.

Durante una comida en el Eliseo, cuyo ambiente apenas osamos imaginar, el presidente francés, incapaz de controlarse, dio rienda suelta a su altivez y estigmatizó esta vez a la Comisaria europea de Justicia, la luxemburguesa Viviane Reding, por sus recriminaciones; y sus obsequiosos cortesanos no lo hicieron mejor al desviar la forma de la amonestación en detrimento del fondo. Ahora bien, la estigmatización se estableció claramente. Y los rodeos de los ministros escabulléndose o tratando de minimizar los hechos a semejanza de su mentor no hace sino aumentar la gravedad de sus decisiones. Se sabía que el gobierno Sarkozy está minado por el populismo. La realidad es sin duda mucho peor. Y la arrogancia del pequeño monarca y de quienes lo apoyan bate todos los récords de vulgaridad. Cuando se oyen las indignadas reacciones de estos siniestros individuos que reaccionan a las críticas que se les hacen cuando muchos de ellos están metidos en en cuestiones más que dudosas, no sólo deberían ser cesados sino en una democracia sana y que se respete, se les debería quitar su derecho a ser elegidos. ¡De por vida!

Notas:

[1] “Vuelve el tiempo de las redadas en Francia…”, http://www.rebelion.org/noticia.php?id=113134

* Término eufemístico con el que se conoce en Francia a los gitanos (n. de la t.)

Texto original : http://www.mondialisation.ca/index.php?context=va&aid=21095

Traducido del francés para Rebelión por Beatriz Morales Bastos

Daniel Vanhove: observador civil, escritor. Su último libro es La Démocratie Mensonge, Ed. Marco Pietteur – colección Oser Dire, 2008.

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Sobre el Autor

Daniel Vanhove est Observateur civil et auteur. Son dernier ouvrage La Démocratie Mensonge – 2008 – Ed. Marco Pietteur – coll. Oser Dire.

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