El nuevo ministro de Medio Ambiente, Shinjiro Koizumi, es una estrella política en ascenso en Japón, no solo por abogar por la lucha contra el cambio climático sino por defender causas sociales vinculadas, incluso, hasta con la licencia de paternidad.
El funcionario de 38 años fue nombrado el pasado 11 de septiembre, en la reestructuración que el primer ministro Shinzo Abe realizó en el gabinete, y se convirtió en el tercer político más joven en asumir una cartera ministerial desde el final de la Segunda Guerra Mundial (1945).
Un día después de asumir como ministro, Koizumi anuló los planes de su antecesor de verter el agua contaminada del reactor de la planta nuclear de Fukushima Daichii en el océano Pacífico.
Asimismo declaró que buscará formas de eliminar la energía nuclear y hacer de la energía renovable la principal fuente de energía de Japón.
‘Estaremos condenados si permitimos que se repitan los accidentes nucleares’, aseguró.
Además, anunció que alentará una mayor innovación en la lucha contra el cambio climático y afirmó que la política del Gobierno es reducir la dependencia de la generación de energía a carbón.
Sobre su agenda política, indicó que su objetivo es ver a Japón como líder mundial en temas ambientales y para los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
Varios expertos coinciden que el nombramiento de Koizumi, aunque sea para una de las carteras con menos peso, podría impulsar la popularidad del Gobierno.
El nuevo ministro es un político muy popular y carismático, lo cual ratificó una reciente encuesta del rotativo The Yomiuri Shimbun al obtener un índice de aprobación superior al 60 por ciento.
La popularidad de Koizumi a menudo se acerca mucho a la de Abe en las clasificaciones de liderazgo, e incluso lo ha superado recientemente, según fuentes periodísticas.
Algunos atribuyen su notoriedad, entre otras cosas, a que es el segundo hijo del ex primer ministro Junichiro Koizumi y a su sorpresivo matrimonio con la estrella de televisión Christel Takigawa.
No obstante, si bien es cierto que proviene de una familia política reconocida, sus fortalezas políticas no se derivan simplemente de sus antecedentes familiares.
Koizumi ha sido elegido en la Dieta cuatro veces y es la cuarta generación de la familia Koizumi que ocupa un escaño parlamentario.
Está considerado un excelente orador y a menudo es invitado por otros políticos del gobernante Partido Liberal Democrático para pronunciar discursos durante las campañas electorales.
Posee una maestría en ciencias políticas de la Universidad de Columbia en Nueva York y trabajó como investigador en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, con sede en Washington DC.
Sobre su posición en algunos temas de la vida social, Koizumi ha apoyado permitir el uso de apellidos separados por parejas casadas, prohibido por la ley actual, y ha criticado algunas de las costumbres tradicionales del país.
Su boda con Christel Takigawa, una estrella franco-japonesa de 42 años conocida como la cara de la exitosa candidatura de Tokio para los Juegos Olímpicos del próximo año, fue ampliamente cubierta por la prensa.
Sin embargo, sus declaraciones de acogerse a la licencia de paternidad después del nacimiento de su hijo a principios del próximo año han sido el centro de varios titulares.
En el país nipón, todavía es raro que los hombres tomen licencia de crianza, aunque el Gobierno está presionando por la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres.
Los expertos señalan que el perfil político de Koizumi es un aspecto a tener en cuenta en la elecciones de 2021, pero tendrá que demostrar que tiene la capacidad de implementar su agenda política y abordar algunos de los problemas ambientales más apremiantes de Japón.
Amelia Duarte de la Rosa
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