La Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de Venezuela se apresta hoy a afianzar el futuro del país con el debate de la Ley de Inversión Extranjera, norma que sin dudas está estrechamente ligada al surgimiento del Petro, la moneda virtual de este país.
La constituyente Keila De La Rosa, parte de la Comisión de Economía, anunció la víspera este apresto. ‘Vamos a discutir la Ley de Inversión Extranjera, donde vamos ahacer una lectura a todos los empresarios a quienes le seguimos garantizando la seguridad jurídica’, precisó De La Rosa.
La de inversiones es una iniciativa que se complementará con la Ley del Arco Minero, que propone un nuevo régimen para los inversionistas y un nuevo régimen tributario para el desarrollo soberano del Arco, cuyas entrañas guardan cuantiosos recursos que respaldarán la vida del Petro.
El 20 de diciembre, la ANC nombró una comisión especial para evaluar un proyecto de Ley de Inversión Extranjera presentado por el presidente Nicolás Maduro, la misma que plasmará la idea de los venezolanos para romper el cerco económico y ser más libres de los que controlan los mercados.
El anuncio no pasó inadvertido para algunos que siguen la situación de este país, presionado y al borde del abismo a causa de la guerra económica y de todo tipo de acciones para derrocar al gobierno, además de querer apoderarse de sus cuantiosos recursos naturales.
Una mirada a las últimas iniciativas gubernamentales llevan a pensar que la normativa que se debatirá está indisolublemente ligada al anuncio de Venezuela sobre la creación de una moneda digital, el Petro, lo que según analistas y expertos coloca al país en la vanguardia de la tecnología y las finanzas globales.
La iniciativa sobre las inversiones extranjeras debe marchar de la mano de la moneda virtual, cuyo surgimiento generó enormes expectativas acerca de cómo evolucionará el sistema financiero internacional, según valora Federico Kucher, investigador del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag).
Tal como anunció el presidente Maduro, el precio del Petro no estará vinculado a los caprichos y la especulación del mercado, sino que se asociará al valor de los activos reales como el oro, el gas, el diamante y el petróleo.
La expectativa es muy alta pues con la Ley de Inversión Extranjera los interesados en trabajar con los venezolanos tendrán grandes cantidades de materias primas a su disposición y no tendrán que enfrentar los procesos especulativos del dólar y otras monedas, para eso estará el Petro.
Eso implica que la escala y el volumen de las transacciones que puede tomar el mercado es ilimitado, ahí radica parte de la Ley de Inversión Extranjera que alista la ANC venezolana.
La ley de Inversión Extranjera y su vínculo con la moneda virtual permitirá un mercado sin intermediación ni manipulación de terceros actores, lo que implica que Washington no podrá meter su mano, señalan analistas.
Ahora comienza una guerra contra el tiempo y entre más rápido la ANC apruebe la nueva Ley de Inversión Extranjera y el Petro comience a dar sus pasos, menos posibilidades tendrán los enemigos externos e internos de detener la revolución iniciada por el Comandante Hugo Chávez.
Asimismo, el avance que logren los constituyentes a partir de ahora afianzará el proceso de recuperación y relanzamiento económico el próximo año, al fortalecer el sistema financiero, contrarrestar el bloqueo contra la nación y acceder a nuevas formas de financiamiento internacional.
Según el vicepresidente sectorial de Comunicación, Turismo y Cultura, Jorge Rodríguez, la moneda estará ‘respaldada por la garantía de las inmensas riquezas que tiene Venezuela’, como los más de 297 mil 500 millones de barriles en reserva que se encuentran en la Faja Petrolífera del Orinoco, en las toneladas de oro ya certificadas, gas, coltán, uranio y diamantes.
Pero esas enormes riquezas deben explotarse, por eso la importancia de normar la inversión extranjera y su estrecha relación con el Petro.
Luis Beaton
Comentario sobre artículos de Globalización en nuestra página de Facebook
Conviértase en miembro de Globalización