Los desencuentros con el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Heiko Maas, caracterizaron hoy los primeros momentos de la visita que realizó a esta ciudad el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo.
Según medios de prensa, durante las conversaciones se evidenciaron las crecientes diferencias, que ahora se extienden a temas como el comercio exterior, el diferendo con Irán y la guerra contra el gigante chino de las telecomunicaciones Huawei.
A pesar de la cercanía tradicional entre ambos socios, también afloraron posiciones discrepantes sobre la solución del conflicto venezolano, el desenvolvimiento de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y la lucha contra el cambio climático.
No obstante, sobre la reunión con Pompeo, el funcionario alemán manifestó que a través de una estrecha cooperación se pueden solucionar los grandes problemas geopolíticos actuales.
El secretario de Estado norteamericano dejó entrever las diferencias en cuanto a las aproximaciones de ambos países a la crisis venezolana, pese a la apuesta final común de alcanzar ‘la vuelta de la democracia’ en esa nación.
Pompeo centró su intervención en las diferencias en torno a la relación con Irán, sobre el que Estados Unidos quiere elevar la presión, y con el gigante tecnológico chino Huawei.
Advirtió a sus socios europeos que si confían sus redes 5G de transmisión de datos a la empresa china, Washington podría restringir la información que comparte con ellos.
‘Tendremos que cambiar nuestra conducta porque no podemos permitir que información de ciudadanos particulares de Estados Unidos o datos de seguridad nacional atraviesen redes que no percibimos como fiables’, aseguró.
El representante de Washington manifestó que su país no puede permitir que la información estadounidense acabe ‘en manos del Partido Comunista Chino’.
La ‘tecnología del futuro necesita valores occidentales’, agregó.
Alemania y los demás socios europeos no se han posicionado de forma determinante en este asunto, clave para el desarrollo tecnológico futuro y que ha agudizado el conflicto comercial entre Washington y Beijing.
Los puntos de encuentro entre Washington y Berlín se limitaron a exigirle a China el cumplimiento de las reglas de juego en materia comercial y a solicitar la cooperación de Rusia en los conflictos en Siria y Ucrania.
Respecto a Irán, Maas apuntó que Alemania tiene ‘los mismos objetivos’ que Estados Unidos, pero ‘diferentes aproximaciones’.
Ambas naciones buscan disuadir a Teherán de acceder a armas nucleares y asimismo esperan que responda preguntas sobre su programa de misiles balísticos, manifestó.
Alemania intenta rescatar el acuerdo nuclear con Irán de 2015, que apuntó a que la nación persa frenase el desarrollo de armas nucleares, mientras que Estados Unidos, que ya no es parte de ese convenio, aplica presión sobre Teherán mediante sanciones económicas. Antes de regresar a Washington, Pompeo tiene previsto entrevistarse con la canciller federal alemana, Angela Merkel.
Prensa Latina
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