Globalización

1.- Publicó ayer La Jornada: “Decepcionante, el avance en salarios después de la firma del TLCAN. El crecimiento de los ingresos de los trabajadores y su capacitación siguieron siendo decepcionantes en México luego de que entró en vigor el Tratado de Libre Comercio (TLCAN), aun cuando en el periodo se dio un incremento en el gasto en educación pública, refirió el Banco Mundial”.

El mismo López Obrador ha reconocido que “los salarios mínimos en Honduras, Guatemala y El Salvador son el doble de México”. Única solución real: que los empresarios regresen los miles de millones de pesos producto de la explotación criminal por muchas décadas.

2.- Las estadísticas demuestran que todos los aumentos nominales al salario mínimo –por lo menos lo que he revisado desde el gobierno de Salinas- han pretendido igualarse a la inflación, pero con los criminales aumentos de precios los salarios reales se convierten en una burla, en una mentada de madre al pueblo. Por eso el pueblo dice siempre: “¿para qué queremos aumento de salarios si luego el aumento de los precios nos dejan peor?”. Puta, AMLO busca acordar con los empresarios para que no sean lesionados; mientras tanto le sigue dando en la cabeza al trabajador. Por lo menos debe aumentar el salario mínimo al doble para dejar de ser la burla mundial.

3.- Por esto el fascista Trump tiene razón al exigir que México aumente significativamente sus salarios a 300 pesos diarios. Los empresarios no tienen margen para quejarse e impulsar la inflación. Si el pueblo ya tiene conciencia como dice AMLO, pues debe salir a la calle exigiendo subir a 300 pesos al mínimo, pidiendo la expropiación de empresarios que protesten y amenazando a los negociantes que provoquen inflación.

Salir a la calle con máscaras o sin ellas; el caso es que la gente se acostumbre a luchar y ver que la solución de todos los problemas está en sus manos; nunca en las decisiones de los ricos explotadores o de los funcionarios de gobierno.

Pedro Echeverría V.